Noviembre: Cuerpos en concierto
Napalm Death:
Realmente los metaleros se mueven como en las películas. Nunca había ido a un concierto así, nunca había escuchado un disco entero de Napalm Death. El coro que se oía afuera del local era el más potente y sincronizado que he escuchado traspasar paredes. El pogo tenía un ritmo muy distinto al de los conciertos punk, otro tipo de violencia. Los metaleros sí juntan el dedo anular con el medio y mueven el brazo en alto de arriba a abajo al son de sus cabezas. Mientras tanto, sus pelos largos rozan tu piel.
Jeanette:
Jeanette quería que bailáramos, nos instó a ir hacia adelante y abolir las diferencias de precios de las entradas. Se volteaba y veías su silueta marcada por el humo artificial y las luces de colores. Las señoras a mi costado se movían suavemente de un lado a otro, y los brazos arriba de las cabezas, de izquierda a derecha. Por primera vez, mi hermana y yo hicimos eso en un concierto y ella encendió un encendedor para acompañar el movimiento. Por ratos, el auditorio se movía a ritmo de un twist fuera de tiempo, más lento, más gentil. Con una actitud romántica que se asombraba de querer ser audaz.
II Festival de reggaeton:
Si alguien no te abraza, alguien se acercará lentamente, al acecho. Todos buscan proximidad, pero no es brusco. Puede inspirar desconfianza, pero cada uno tiene el control de su cuerpo y ve con quien lo comparte. Hay algo en el ligero machismo que se siente en algunos hombres que los dota de una amabilidad por ratos artificial, por ratos ingenuamente sincera. ¿Cómo ser caballero en el acoso? Las muchachas que nos rodeaban en el festival, decidían con quien bailar, los muchachos estaban a la expectativa de ser los elegidos. Flexionaban las piernas, cantaban en grupo. Las ropas anchas de los chicos disimulaban los delgados cuerpos adolescentes, los brazos sin músculo, las nalgas pequeñas. Las muchachas tenían cuerpos totalmente distintos entre sí, no como en otras fiestas, donde no sólo el vestir es el mismo entre las que bailan.
Realmente los metaleros se mueven como en las películas. Nunca había ido a un concierto así, nunca había escuchado un disco entero de Napalm Death. El coro que se oía afuera del local era el más potente y sincronizado que he escuchado traspasar paredes. El pogo tenía un ritmo muy distinto al de los conciertos punk, otro tipo de violencia. Los metaleros sí juntan el dedo anular con el medio y mueven el brazo en alto de arriba a abajo al son de sus cabezas. Mientras tanto, sus pelos largos rozan tu piel.
Jeanette:
Jeanette quería que bailáramos, nos instó a ir hacia adelante y abolir las diferencias de precios de las entradas. Se volteaba y veías su silueta marcada por el humo artificial y las luces de colores. Las señoras a mi costado se movían suavemente de un lado a otro, y los brazos arriba de las cabezas, de izquierda a derecha. Por primera vez, mi hermana y yo hicimos eso en un concierto y ella encendió un encendedor para acompañar el movimiento. Por ratos, el auditorio se movía a ritmo de un twist fuera de tiempo, más lento, más gentil. Con una actitud romántica que se asombraba de querer ser audaz.
II Festival de reggaeton:
Si alguien no te abraza, alguien se acercará lentamente, al acecho. Todos buscan proximidad, pero no es brusco. Puede inspirar desconfianza, pero cada uno tiene el control de su cuerpo y ve con quien lo comparte. Hay algo en el ligero machismo que se siente en algunos hombres que los dota de una amabilidad por ratos artificial, por ratos ingenuamente sincera. ¿Cómo ser caballero en el acoso? Las muchachas que nos rodeaban en el festival, decidían con quien bailar, los muchachos estaban a la expectativa de ser los elegidos. Flexionaban las piernas, cantaban en grupo. Las ropas anchas de los chicos disimulaban los delgados cuerpos adolescentes, los brazos sin músculo, las nalgas pequeñas. Las muchachas tenían cuerpos totalmente distintos entre sí, no como en otras fiestas, donde no sólo el vestir es el mismo entre las que bailan.
1 Comments:
At 9:35 a. m., Anónimo said…
la crónica del concierto metalero me deja la sensación de car wash
Publicar un comentario
<< Home